Educar a un hijo único puede llegar a convertirse en un auténtico reto para los padres. El objetivo de cualquier padre es que su hijo sea feliz y puede surgir cierta inquietud cuando se trata de educar a un hijo sin hermanos.

Los aspectos que más pueden preocupar a los padres de hijos únicos suelen ser:

– Soledad

– Socialización

– Sobreproteger demasiado

– Falta de sobriedad y austeridad

– Convertir al niño en un “ pequeño adulto”

Aunque trabajo en un entorno donde abundan las familias numerosas, a lo largo de todos estos años también he tenido ocasión de atender a familias con hijos únicos. Hay enormes diferencias entre un hijo único bien educado, que se muestra feliz, y un hijo único educado de una forma menos acertada, que muestra rasgos de infelicidad.

A las familias con más de un hijo se les dice que cada hijo es único e irrepetible, ya que saber dar y acertar con lo que cada uno de nuestros hijo necesita y que pueda desarrollar su propia identidad, no es una tarea fácil. No todo está ganado por el hecho de tener hermanos, hay que ayudarles a establecer relaciones sanas con ellos.

El mismo reto se presenta ante los padres de un único hijo. Asegurarnos de que tiene las oportunidades para desarrollar su identidad, sin el “roce” constante de los hermanos, supone crear espacios y tiempos para que pueda estar con otros niños y crear relaciones de amistad que les ayuden a crecer.

Al fin, generar oportunidades de crecimiento y acompañar a los niños en su desarrollo es el principal papel de los padres, independientemente de las circunstancias que nos tocan vivir.

A continuación, os dejo dos artículos cortos, con algunas ideas prácticas que pueden ayudar a familias con un sólo hijo.

● https://www.hacerfamilia.com/educacion/educar-hijo-unico-hijo-unico-20170123104343.html

● https://www.hacerfamilia.com/familia/hijos-unicos-educarles-20190109145237.html