Dijo Alejandro Dumas: “La esperanza es el mejor médico que conozco” y, realmente, en la educación es un valor imprescindible a la hora de acompañar a nuestros niños en su crecimiento.
Disfrutamos con ellos, se suben a nuestros regazos y nos dicen que nos quieren, les encanta contarnos sus secretos y compartirlos con nosotros…y de repente, algo pasa, algo cambia, ya no responden a nuestro cariño como antes: la preadolescencia ha llegado, ha entrado en sus vidas para quedarse, al menos, una larga temporada.
Este Sitio Web utiliza Cookies analíticas para mejorar nuestros servicios y la experiencia del usuario. Al navegar en el Sitio Web o interactuar en el mismo, aceptas el uso de estas Cookies.No obstante, puedes cambiar la configuración de Cookies en cualquier momento. Más Información