Julio 2019 – Erótica y materna
Mariolina Ceriotti Migliarese
Ed. Rialp
2018
Para Ceriotti lo materno y lo erótico son formas complementarias de expresarse la mujer, e igual de importantes. Lo materno no es sólo la capacidad de engendrar, ni lo erótico se refiere solo a la sexualidad. La parte erótica incluye el deseo, la autonomía, el respeto a sí misma y la capacidad de gustar y gustarse, el placer de cuidarse, saber protegerse y reservar espacios para el propio equilibrio.
La parte maternal incluye la capacidad de cuidar de los demás, la sensibilidad y la creatividad para dar afecto. El desequilibrio de la parte erótica puede derivar en egocentrismo, vanidad y auto referencialidad y el desequilibrio de la parte materna puede originar el chantaje emocional, la frustración, la culpa. La dos dimensiones, erótica y materna, son necesarias y ninguna de ellas basta para dar plenitud a la mujer. El reto es encontrar el equilibrio entre ambas. Un ensayo sumamente interesante para leer despacio y reflexionar.
Existe una sabiduría femenina por descubrir, afirma, que se extiende desde el cuidado del cuerpo, a las relaciones, del sentido del ritmo del tiempo a la capacidad de celebrar.
A lo largo de seis interesantes capítulos la autora -Mariolina Ceriotti Migliarese, psiquiatra con amplia experiencia en el trato con mujeres y familias- describe qué es lo propio del sexo femenino: explora el “misterio” de su universo, sus características y sus recursos inagotables, con una original reflexión llena de ideas concretas y positivas, que serán de gran ayuda para aquellos -hombres y mujeres- que no están satisfechos con las relaciones temporales e incompletas, sino que quieren conocerse entre sí, respetarse y amarse unos a otros.
La autora propone que la mujer tiene como dos dimensiones: una erótica y otra materna, inseparables y complementarias.
Las dos dimensiones, erótica y materna, son necesarias y ninguna de ellas basta para dar plenitud a la mujer. El reto es encontrar el equilibrio entre ambas. Hoy en día, en algunos ambientes se quieren separar estas dos dimensiones, sin tener en cuenta que haciéndolo se va contra los principios fundamentales que hacen que una mujer sea mujer.
Estamos asistiendo a una preocupante división entre la dimensión erótica y la dimensión materna, entre el amor propio y el amor al otro: si el exceso del componente erótico/narcisita conduce, de hecho, al egoísmo y a la sequedad emocional, el desequilibrio hacia el componente materno empuja hacia modalidades asfixiantes que son igualmente peligrosas en las relaciones interpersonales. Una comprensión correcta de la mujer debe integrar estas dos dimensiones.
Por la temática del libro, describe algunas características de la sexualidad masculina y femenina, con claridad pero con mucha delicadeza, mostrando un gran respeto a esta dimensión humana.
Este libro se propone aportar elementos de reflexión a todos aquellos hombres y mujeres que no se conforman con vivir relaciones provisionales e incompletas y que todavía desean encontrarse, respetarse y quererse.